Durante semana santa se presentaron seis atentados terroristas en el país, uno de ellos en el Cauca

Durante la Semana Santa, Colombia enfrentó una escalada de violencia por parte de grupos criminales que, en un acto de desesperación ante los recientes golpes recibidos por la Fuerza Pública, recurrieron a prácticas brutales propias del sicariato de los años 80: ataques cobardes contra uniformados indefensos y agresiones indiscriminadas a la población civil. 

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, confirmó que, en medio de esta ola de terror, seis policías, dos militares y varios civiles fueron asesinados vilmente. Entre los ataques más graves se registraron: 

- Dos atentados en Cali. 

- Un ataque en Jamundí. 

- Un atentado en Mondomo, Cauca, donde perdió la vida una mujer civil. 

- Un ataque en Huila, con dos jóvenes civiles muertos. 

- Un atentado en Antioquia, donde cayó un uniformado de la Policía Nacional. 

"A pesar de estas dolorosas pérdidas, nuestra Fuerza Pública logró frustrar 148 intentos de atentados", destacó el ministro Sánchez, quien enfatizó que "el terrorismo no nos va a doblegar". 

Las autoridades reportaron que, aunque en operativos previos se neutralizó a casi un centenar de integrantes de estas estructuras criminales, los grupos armados respondieron con una embestida sangrienta. Los uniformados asesinados fueron atacados de manera cobarde y vil, en actos que han generado indignación nacional. 

El gobierno reiteró su compromiso de continuar la ofensiva contra el crimen organizado y pidió a la ciudadanía mantenerse alerta, mientras se refuerza la seguridad en zonas críticas.