Cuerpos encontrados en el Bajo Calima serían de disidentes del Cauca

Una nueva masacre en el Bajo Calima, zona rural de Buenaventura, ha dejado al menos nueve personas muertas en lo que las autoridades atribuyen a una disputa interna dentro del frente ‘Jaime Martínez’ de las disidencias de las FARC. Según fuentes militares, el crimen estaría relacionado con el robo de dineros ilícitos entre miembros de la columna “Wilson González”, perteneciente al Estado Mayor Central. 

El coronel Ricardo Alberto Visbal, comandante de la Segunda Brigada de Infantería de Marina, confirmó que hasta el momento se han recuperado siete cuerpos, mientras continúan las labores de búsqueda para localizar a las demás víctimas. Los cadáveres presentaban impactos de bala y signos de violencia extrema, lo que sugiere un ajuste de cuentas entre grupos criminales. 

Aunque las autoridades aún adelantan los procesos de identificación, se presume que la mayoría de las víctimas serían originarias del departamento del Cauca, donde este grupo disidente tiene fuerte presencia. La zona del Bajo Calima, cercana a la costa pacífica, ha sido históricamente un corredor estratégico para el narcotráfico y grupos armados ilegales. 

Según reportes de inteligencia militar, el enfrentamiento habría estallado por el robo de una importante suma de dinero proveniente de actividades ilícitas, lo que desató una ola de violencia entre facciones del mismo grupo armado. El frente ‘Jaime Martínez’, que opera en el Valle del Cauca y Cauca, ha sido señalado en los últimos meses por reclutamiento forzado, extorsión y narcotráfico.