Pasó una semana sin que se sepa del paradero de Stefanía Córdoba y Samir Piedrahita, secuestrados en el municipio de Cajibío. Según la fiscalía se presume que están en poder de un grupo armado organizado.
Mientras tanto los familiares de estas dos personas, viven en la incertidumbre sin tener noticias.
Ismael Peidrahita, el padre de Samir, dijo que el día de los hechos, su hijo acudió a prestar una ayuda y no se imaginaba lo que iba a suceder.
"Mi hijo estaba en un lote que estaba vendiendo y en ese momento estaba esperando a un cliente cuando llegaron esos individuos en moto. En la camioneta estaba la muchacha de la CRC. Mi hijo y la funcionaria no se conocían, ella estaba encargada de otorgar unos permisos para talar unos árboles, ella estaba ahí cuando los individuos llegaron para preguntar por un lote, mi hijo los atendió y se los llevaron en la camioneta de la muchacha", dijo el padre de la víctima.
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