El gobierno responsabilizó a las disidencias de las Farc, de ser los autores de la masacre de cinco personas en Santander de Quilichao. En los hechos fue asesinado un profesor, su esposa y su hija de 15 años.
Tras este y otros hechos violentos registrados en el norte del Cauca, el gobierno dijo que iba a desatar una ofensiva de protección para la población civil, aumentando la presencia de la fuerza pública y llevando a niveles nunca antes alcanzados, las labores de inteligencia.
Desde el ministro de defensa se aseguró que las informaciones de las autoridades dan cuenta que el grupo armado, exactamente la estructura Dagoberto Ramos, estaría detrás de estos hechos ocurridos en el resguardo de Canoas y con lo que se habría cometido una violación al cese al fuego y hostilidades.
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